Ironía.

Fría noche de un caluroso día.
Me encuentro solo en una multitud de gente.
Rodeado por todas partes de un absoluto vacio.

Soñando despierto, pensando dormido...

Y mientras mi mente divaga entre lugares que no existen.. Te recuerdo...

Recuerdos de cosas que aun no han sucedido.
Memorias de algo que no existió.
Me río de tristeza y me detengo mientras corro detrás de la sonrisa que olvido tu corazón.

Pongo una pausa a una vida que ya estaba en congelada desde el día que tus ojos dejaron de posarse en mi, la pauso para mirar dentro de mi exterior y ver cuanto duele la felicidad si no te tengo a mi lado para compartirla.

Escucho tus miradas brillando con gran oscuridad dentro de mi cabeza.
Veo tus palabras que una vez me dibujaron el sonido de una caricia; desvaneciéndose frente a mis ojos.

Recuerdo ese Hola con el que nos despedimos.
Ese Adiós eterno con el que nuestros corazones se presentaron uno al otro.
Recuerdo... El paradigma de tus besos que siempre me diste, pero nunca fueron mios.
Recuedo tus ojos que aunque me miraban, nunca me vieron.
Recuerdo ese día que la vida nos permitio unir nuestras realidades por un instante, también el día que la vida nos alejo para estar mas cerca.

Y es que aunque abramos los ojos para no ver la verdad falsa, lo único posible cuando se intenta lo imposible es tener éxito total fracasando en lo que logramos no alcanzar.